¿Puedo pedirte 30 minutos al día? Quizás pienses que esos 30 minutos podrían aprovecharse mejor haciendo otra cosa, pero es ahí cuando te digo, “No, estos 30 minutos valen más que sólo 30 minutos”
No hay duda de que somos parte de una cultura a la cual le es indiferente el estrés, la ansiedad, las malas decisiones de estilo de vida y el sedentarismo. Aprendemos a vernos a nosotros mismos y a preguntar, “¿Qué tanto puedes hacer por mí?” en vez de, “¿Cómo puedo ayudarte a hacer mejor tu trabajo?”
Hoy en día, vivimos para nuestros cuerpos, pero no para nuestras mentes. La gente nos recuerda que debemos detenernos por un momento y respirar pero, ¿por qué no ir más allá de este adagio vacío? ¿por qué no practicar el Pranayama, el yoga de la respiración?
Con dedicarle unos 30 minutos al día, obtendrás increíbles beneficios como:
•Mejorar tu concentración
•Tener una mejor estabilidad entre tu cuerpo y mente
•Aliviar los síntomas del estrés, diabetes, hipertensión, insomnio
•Mejorar tus funciones respiratorias
•Tener un mejor control sobre tus emociones
•¡Y mucho más!
Este libro te contará detalladamente sobre.
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